Cada signo del zodiaco se personifica a través de una representación. En el caso de Capricornio ¿sabes cuál es su animal?

• Capricornio es la cabra de mar: mitad cabra mitad pez.
• Para la mitología griega este signo es Egipán, un ser mitológico muy inteligente y honrado.

Antes de comenzar a hablar sobre Capricornio es importante mencionar un dato no menor: el animal que representa al décimo signo del Zodiaco Occidental atraviesa los senderos más empinados y solitarios, pero al final siempre alcanza la cima que para otros es inaccesible e imposible. Es la unión entre dos formas: la cabra, que siempre se apega a la lógica y la practicidad, y el pez, que simboliza la libertad, el deseo de salir a cumplir sueños.

¿Qué animal es Capricornio?

Este signo zodiacal es figurado por la cabra que tiene una cola de pez, cuya combinación está repleta de significados y refleja además la personalidad de Capricornio. Este representa el esfuerzo por escalar hacia arriba. Es un ambicioso admirador de lo superior, procurando ponerse siempre a la cabeza de su profesión y logro social. La ambición de superioridad se debe, en parte, al deseo de separarse del rebaño, además de una marcada tendencia a la soledad. Está asociado a la cabra y a la montaña ya que es por donde el Sol empieza su camino ascendente.

Por otra parte, la cola del pez es el elemento del temor en la naturaleza de Capricornio, en el cual lo individual se funde y pierde su propia identidad. Simboliza que no debe olvidarse de su parte emocional y que sus metas no deben ser tan rígidas o alejadas de una verdad interior. Esa es la razón por la que Capricornio puede llegar a ser extremadamente versátil. Sin embargo, diversas teorías señalan a la cola de pez como una característica negativa. Esta representaría a los fantasmas del pasado que no permiten avanzar. Mientras que la cabeza de la cabra es la esperanza que nos inspira a seguir adelante. Así es como la cabra de mar nos recuerda que, a veces, “hay que soltar” o de lo contrario quedaremos estancados.

La representación de Capricornio es una parábola de la lucha por encontrar un lugar en la vida de la actualidad. El esfuerzo por romper con la monotonía y la lucha personal con las exigencias generales. Por ello tiene carácter de líder y es un ejecutivo nato; representa la sabiduría del anciano y la etapa de la madurez. Entre sus dones está su capacidad de trabajo, disciplina y honradez. Firmes en sus decisiones, son estrategas natos aunque a veces su ambición puede llevarlos a ser algo impiadosos.

Capricornio es honestidad, valentía y obstinación, le gusta plantearse metas a corto plazo y cumplirlas. Es el signo que se exige todo el tiempo, porque confía en sus capacidades y además ama la perfección. Puede seguir las reglas a costa de dejar de lado sus emociones y lo que realmente quiere, como si se sintiera obligado. Honra la discreción, no puede dejar de lado la responsabilidad. Siempre lo acompaña la sensatez y la fortaleza, por eso no se rinde aunque se caiga cientos de veces en el camino. Es un signo dedicado, leal, terco y convencional.

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Historia de Capricornio en la mitología griega

Este signo está asociado a la historia de Egipán, la cabra con cola de pez; un ser mitológico con la cabeza y el cuerpo de cabra y cola de pez. Vivía cerca del mar y era reconocido por ser una criatura honrada e inteligente. Además, tenía la capacidad de manipular el tiempo debido a que fue criado por Cronos, el dios del tiempo.

El animal vio con tristeza que sus hijos, las llamadas “cabras de mar”, nadaban hacia la playa y permanecían en tierra firme. Sentían una gran atracción por la costa, quedaban fascinadas por el sol y se echaban a descansar. Así, con el tiempo, perdieron sus colas, su inteligencia y la capacidad de hablar y de vivir en el mar: estaban transformándose en cabras normales. Para impedir que esto ocurriera, Egipán invirtió el tiempo y avisó a sus hijos del destino que les esperaba en la Tierra, pero su esfuerzo fue en vano. Sus hijos continuaron nadando hacia la Tierra y abandonaron el mar.

Desolado, Egipán pidió a Cronos que acabara con su inmortalidad. En vez de eso, fue colocado en el cielo como constelación de Capricornio. De allí, podría seguir viendo a sus hijos, incluso al jugar en el pico más alto de las montañas.

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